sho soy el cabasho por el cual la gente debería apostar

 a mitad de camino a casa volviendo del bosque con mi túnica y capucha negras cambié mis zapatos de tacón por unas sandalias baratas que adquirí en calle 1 casi sin meditación apenas premeditadamente sabía que buscaba un modelo y sabía cuál es mi talle caminando por diagonal 80 con un extraño frío recorriendo mi corazón y mi ser me puse en pies y cambié tacones por sandalias y vine todo el camino oyéndolas graznar y me sentí acompañada  como una pseudodivinidad del bosque una ninfa con tacha escoltada por dos patos de hule también negros patos presagios patos de agüero caminando por las grasientas calles del centro comercial más accesible de la zona bordeando las vías del tren donde un amigo soñó que me oía gritar antes de arrojarme, horribles sueños os doy, gran nube de gas oscuro, te encuentro mientras ponés las llaves del local de una esquina vos con tu ropa de trabajo yo que vuelvo de no sé a dónde ir salía a hacer unas compras después de ingerir un hongo me compré product...

 escribo algo que considero una mierda con un pequeño aviso al lector porque tengo una cuestión no sé ahora algo suave quiero decir no quiero tratarlos como idiotas ni pedir perdón ni con todo respeto robarles la atención  cómprenme  soquetes o  sobre ustedes caerá una maldición no esque me quedé con las sensación después de escuchar a una poeta muy segura de sí misma agitar un panfleto entre ya adeptos y yo quería arrancarle las trenzas y decirle qué fracaso  siempre estás diciendo en estos eventos quedados donde encima falla el volumen cosas recalentadas muy de la última hora pero viralizadas ad infinitum como un meme sobre la depresión hasta generar una espiral de onanismo y  adhesión donde no te la jugás y agitás políticamente la bandera del éxito social entre la espuma progre espero que te paguen con hummus

mi poesía evolucionó a la no existencia, la no manifestación, el fenónemo de no ser un fenómeno estúpida fenómena con granos con lentes con frenos, una poesia estúpida que pone así carita de tonta o pasa desapercibida en un aplauso sin apladir mirándose las manos quietas porque el espectáculo le pareció horrible, malo, ni siquiera feo, malo, sin efecto soy una cosa que   no asisto no voy percevero en la quietud como una estatua de yeso en potencia que aún es simplemente un cubo sin ser esculpido tallado sin últimos detalles solo esquinas gastadas, ocupando un espacio chiquito igual una estructura que se achica hasta tener el tamaño de un terrón de azúcar arriba de una llama azul, una melacita mezclada con algún preparado espirituoso que circula densa y flota entre las fórmulas palitos, yuyos, pétalos, especias mezclado pero no integrado con olor a viejo remedio , escribir esta cosa insulsa como té digestivo  sensación engañosa de depuración acumulación de espacio en el es...